viernes, 16 de diciembre de 2011

Capítulo 44.


Al tocar su piel, un escalofrío me recorrió todo el cuerpo. Miles de mariposas revoloteaban en mi estómago. Sus ojos estaban clavados en los míos. Una sonrisa se me dibujó en la cara. Me acerqué lentamente a él. Una gota de lluvia golpeó su nariz. Ambos miramos al cielo. Estaba empezando a llover. Volvimos a mirarnos de nuevo. Le limpié la gota de lluvia con mi jersey. Él me acarició la cara. Nos fuimos acercando cada vez más, como dos imanes atraídos por sus polos opuestos. Cerré mis ojos, al igual que él. Hasta que pude sentir como sus labios se unían con los míos.
Tras un largo beso bajo la lluvia nos levantamos y, cogidos de la mano, nos reunimos con los demás. Cuando llegamos todos se extrañaron al vernos caminar juntos, pero sonreían. Sonreían todos menos Jamie. Me quedé mirándolo. Él me miró y me sonrió forzadamente. No estaba bien, se le veía en la cara.
Cogimos nuestras mochilas y nos dirigimos a clase.  Me senté con Justin. Ryan con Lena, y Caitlin con uno de los chicos del grupo, al igual que Rouse. Busqué a Jamie. Estaba sentado con una chica. La misma con la que estaba hablando Justin en la clase anterior. Parecía que se llevaban bien. Jamie me miró, y me sonrió de nuevo. Pero esta vez, más alegre. Le devolví la sonrisa y saqué mis cosas.
Miré a Justin. De vez en cuando, me acariciaba la mano, me miraba y me sonreía. Era genial. Quizás fui demasiado dura con él. Lo volví a mirar. Él estaba escribiendo en su libreta. Me centré en las explicaciones del profesor, puesto que no quería suspender.
En la penúltima clase, me senté con Lena y, en la última, con Jamie. Esta última clase fue hora libre, puesto que la profesora no había venido. A Justin no pareció molestarle mucho que me sentara con él, y eso me agradaba. No me gusta que los chicos sean tan celosos que casi no puedas hablar con los demás. Jamie me preguntó si estaba con Justin, o si sólo fue por un momento. Le conté lo que pasó, me sonrió y me contó que quizás le gustaba Emma, la chica con la que se sentó en las clases anteriores. Comenzamos a hablar sobre otras cosas, y poder conocernos más. Era un chico muy agradable, y también muy gracioso. Me giré sobre la silla para hablar con Lena, que estaba sentada detrás nuestra. Justin y Ryan estaban detrás de ella. Jamie también se dio la vuelta, de forma que todos nos veíamos las caras. Justin me miraba sonriente. Se le veía contento.
Al terminar la clase, cogimos nuestras cosas y nos reunimos en la parada del autobús. Justin me agarró de la cintura y me besó el cuello. Seguidamente, me abrazó tan fuerte que casi me dejaba sin respiración.
-Justin, casi no puedo respirar –dije como pude-
-Oh, perdona –se disculpó mientras me soltaba-
Varios minutos después, llegó el autobús. Fuimos entrando uno a uno, y nos fuimos sentando. Todos los sitios estaban ocupados, menos dos del fondo. Justin y yo nos dirigimos a esos asientos. Él se sentó junto a la ventana, y yo en el asiento de al lado y  dejamos las mochilas en el suelo. Apoyé mi cabeza en su hombro, y él me cogió la mano.  Podía escuchar su respiración, y ,a su vez ,su corazón latir.
-¿De qué has estado hablando con Jamie? –preguntó sin moverse-
-De nuestros gustos y demás. También me ha contado que puede ser que le guste una chica –expliqué-
-Ah, ¿Sí? ¿Quién?
-Emma –reí- La chica con la que estabas hablando antes.
-Sí, sé muy bien quién es –se acomodó en el asiento-
- ¿Y tú? ¿Has hablado de algo con Ryan? –arqueé una ceja-
-De nada importante –rió pícaramente-
-Sí, seguro… -reí-
-¿Esta tarde tienes que hacer algo? –cambió de tema-
-Pues, creo que no, ¿por qué? –pregunté-
-¿Quieres que quedemos para hacer los deberes?
-Oh, yo, una simple chica de ciudad haciendo los deberes con el mismísimo Justin Bieber – me separé de él- No sabría qué decir…
-Vamos, será divertido.
-¿Divertido? ¿Hacer deberes? –le toqué la frente- ¿Qué has tomado?
-No me refería a esa parte –separó mi mano de su frente-
-Oh, ya –volví a colocar mi cabeza sobre su hombro-
-Entonces, ¿Qué me dices?
-No sé, no sé... No es fácil quedar con esta chica para hacer deberes ,sin que me des nada a cambio –le chantajeé-
-¿Y qué quiere esta señorita? –se acercó a mí-
-Mm.. no sé, ¿Qué me darías tú?
Justin no contestó. Se limitó a acercarse a mí lentamente. Juntó su frente con la mía, y nuestras narices se rozaban. Sonrió mientras miraba mis labios. Giró su cabeza, haciendo que nuestros labios se rozaran lentamente.
-Hey Fanny, ya hemos llegado –interrumpió Lena-
Justin y yo nos separamos, nos miramos y sonreímos. Cogí mi mochila y me levanté del asiento.
-¿Y bien? –preguntó mientras me dirigía a la puerta-
-Ya te llamaré –grité desde la puerta-
Me junté con Lena. Fuimos caminando hasta casa desde la parada del autobús.
-Bueno, ¿Qué tal con Justin? –me preguntó-
-Te ha faltado tiempo para preguntar… Pues, muy bien, ¿y tú con Ryan?
-Pues bien –sonrió-
Seguimos hablando hasta que legamos a la puerta de la casa. Lena sacó sus llaves y abrió la puerta.
-¡Ya hemos llegado! –gritó mientras ponía las llaves en la mesita de la entrada-
Nos dirigimos al salón en el cual, para nuestra sorpresa, se encontraban los abuelos.
-¡Abuelos! –gritamos a la vez-
Soltamos las mochilas en el suelo y corrimos a abrazarlos.
-¡Mis niñas! –gritó mi abuelo al abrazarnos-
-Cariño, ya no son niñas, son mujercitas –le corrigió mi abuela-
-¿Cómo estáis? –preguntó Lena-
-Pues aquí nos ves –rió el abuelo-
-Oh, Lena, mírate… estás hecha una mujer –dijo mi abuela mientras la abrazaba-
-Es que no nos vemos desde hace varios años –sonrió Lena-
-Hey, que estamos aquí –intervinieron nuestros padres, que estaban sentados en la mesa-
-Ah, sí. Hola –sonreí-
-Fanny, ¿vamos a subir las mochilas y bajamos a comer? –sugirió Lena-
-Vale –afirmé-
Lena y yo cogimos nuestras mochilas y subimos a la habitación.
-Lena, ¿crees que esta tarde podré quedar para estudiar con Justin? –le pregunté mientras soltaba mi mochila en la cama-
-Pues, supongo que sí, ¿por qué?
-Porque como están aquí los abuelos pensé que sería mejor quedarse con ellos –expliqué-
-Pero, ellos se van a quedar aquí más días, además, vas a estudiar. Yo creo que te dejarán.
Me encogí de hombros. Cogí mi móvil y lo guardé en el bolsillo. Bajamos las escaleras, y nos sentamos en la mesa. Empezamos a comer mientras hablábamos con los abuelos. Me encantaba comer con ellos. Siempre había risas en la mesa. Al acabar de comer, ayudamos a recoger la mesa.
-Mamá, papá, ¿Puedo ir a casa de Justin para hacer los deberes con él? –pregunté mientras ponía caritas-
-¿Justin? ¿Ese Justin? –preguntó mi padre-
-Sí papá, ese Justin –afirmé- ¿Puedo?
-Eh… -suspiró- Está bien, puedes.
-Gracias papi –le di un beso en la mejilla- Voy a arreglarme.
Cogí a Lena del brazo y subimos a la habitación. Al entrar, cerré la puerta.
-¿Qué me pongo? –abrí el armario-
-Hija, vas a estudiar, no vas a una fiesta – se sentó en la cama-
-Sí, pero no pretenderás que vaya así ,¿no? – señalé mi ropa-
-Vas bien.
Me miré al espejo. Tampoco iba tan mal.
-Está bien, me quedaré así – suspiré-
Cogí el móvil y le di un toque a Justin. Con eso, él sabría que tenía que venir a por mí. Preparé la mochila con los libros que me iba a llevar. Me arreglé un poco el pelo, me eché colonia y volví a la habitación. Lena seguía sentada en la cama.
-¿Bajamos? –preguntó Lena-
Asentí con la cabeza mientras cogía la mochila. Bajamos al salón y nos sentamos en el sofá con los abuelos y nuestros padres. Nos pasamos casi una hora hablando y recordando momentos de cuando éramos pequeñas.
-¿Qué te parece si mañana por la tarde bajamos las cajas de fotos del desván? –me susurró al oído-
-Vale- contesté mientras sonreía-
En ese momento tocaron al timbre. Me levanté corriendo a abrir la puerta. Antes, me miré al espejo. Sujeté el mango de la puerta, bajé el manillar y la abrí. Allí estaba Justin, sonriente. Se había cambiado. Vestía unas Supras negras, unos vaqueros ajustados y una sudadera gris. Tan guapo como siempre. Le di un pequeño beso en los labios, él me sonrió y pasó adentro. Cerré la puerta y me dirigí al salón con Justin detrás de mí. Entré agarrada de la mano de Justin. Todos se quedaron mirando un poco sorprendidos, menos Lena.
-Hola, soy Justin – se presentó con una sonrisa-
-Hola –contestaron todos al unísono-
Justin saludó uno por uno a mis familiares. Les dio la mano a mi padre y a mi tío, y a los demás les dio dos besos en la cara.
-Con que tú eres el famoso Justin Bieber, mi hija te adora –observó mi tío-
-Papá, no exageres –bufó Lena-
-Jaja, no pasa nada Lena –sonrió-
-Bueno, ¿nos vamos? –dije un poco nerviosa-
-Como quieras –contestó Justin-
Cogí la mochila y nos despedimos de todos. Salimos de casa y nos subimos al coche de Justin. Él en el asiento del piloto y yo en el del copiloto. Encendió la radio.
-¿Qué quieres escuchar? –preguntó sin quitar la mirada de la carretera-
-No sé, no me importa. Lo que tú quieras.
Justin se encogió de hombros y dejó una emisora puesta. Sonaba “Price Tag” de Jessie J. Esa canción me encantaba. Empecé a cantarla en voz baja. Justin me oyó y subió el volumen. Él también comenzó a cantar. Poco a poco subí el tono de mi voz, de manera que íbamos cantando los dos. Al acabar esa canción nos miramos y sonreímos. Comenzó a sonar otra canción. Esta era de Justin, “Somebody to love”.
-Oh, esa canción – bufé-
-¿Qué pasa? –preguntó Justin mientras bajaba el volumen de la radio-
-Me trae malos recuerdos –agaché la cabeza- pero no te preocupes –subí el volumen-
-No, si quieres la cambio –bajó el volumen de nuevo-
-No ,tranquilo, me gusta mucho la canción. Sube el volumen.
Justin me miró. Le sonreí intentando transmitirle tranquilidad. Él subió el volumen de nuevo. Varios minutos más tarde llegamos a la casa de los abuelos de Justin. Aparcó en frente de la casa y bajamos del coche. Yo estaba un poco nerviosa, puesto que no conocía a Pattie, la madre de Justin.
Nos acercamos a la puerta de la casa. Justin tocó al timbre.
-¿No tienes llaves? –pregunté-
-Se me han olvidado dentro –explicó Justin-
Tras varios segundos de espera, se abrió la puerta. Una mujer bastante joven, un poco más baja que Justin, con los ojos claros y con el pelo castaño, largo y lacio apareció tras la puerta con una radiante sonrisa.
-Hola, tú debes de ser Fanny –me dio dos besos en la cara, sin dejar de sonreír- Encantada de conocerte por fin.
- Sí, soy yo –reí- Igualmente.
Se acercó un matrimonio de mayor edad, los abuelos de Justin, supuse.
-Hola Fanny, somos los abuelos de Justin –se presentó la mujer con una sonrisa-
-Encantada –le di dos besos al matrimonio-
-Mamá, ¿has preparado lo que te dije? –preguntó mientras miraba dentro de la cocina-
-Sí cariño, está todo listo – afirmó Pattie-
-Genial. Vamos a subir para empezar a hacer los deberes –informó Justin-
Pattie asintió y se dirigió al salón mientras subíamos a la habitación de Justin. La casa de sus abuelos era bastante bonita. Estaba decorada de forma muy acogedora. Parecida a la de Lena, pero un poco más grande. La habitación de Justin estaba decorada con varios pósters. Había algunos de 2Pac y ,para mi sorpresa, también había suyos. Había muchos trofeos y medallas de Hockey. La pared estaba pintada de dos colores, la parte superior de blanco, y la inferior de un azul no muy oscuro. La separación de ambos colores era un largo estampado rectangular que alternaba las palabras ‘Toronto’ y ‘Maple laps’ con los símbolos de Canadá y el equipo de Toronto. Las cortinas también tenían ese estampado. Junto a la ventana, había una bandera del equipo de Toronto. La cama, con los mismos tonos que la pared, también tenía esos estampados. Se veía que a Justin le gustaba mucho el Hockey. El escritorio era bastante grande. Había una lámpara a juego con la habitación, un lapicero y varios papeles. El armario tenía grandes dimensiones, y junto a él había un espejo. La habitación de Justin era gigante.
-¿Qué te parece mi habitación? –preguntó mientras sacaba sus libros-
-Pues, es… es… gigante. Y por lo que veo, te encanta el Hockey – dije mientras miraba uno de los trofeos-
-Sí. Digamos que, si no hubiera sido cantante, me habría dedicado al Hockey –sonrió-
Le sonreí en su respuesta. Saqué mis libros y me senté junto a él en el escritorio. Empezamos con Física y Química. Mi punto débil. Son cosas que no entiendo muy bien. Tantas letras, y números, tantas moléculas y teorías… Con lo que yo odio las matemáticas, se multiplica por dos. Justin y yo comenzamos a hacer los ejercicios por separado, y después comprobaríamos los resultados. Yo los hice como pude, pero pensé que estarían todos mal. Cuando terminamos, comprobamos los resultados y estaban todos bien. No sabía cómo, pero los hice bien. Guardamos los libros y sacamos la siguiente asignatura, y así sucesivamente. Tras varias horas, miré el reloj. Eran las seis y media.
-Justin, ¿podemos parar un rato? Estoy cansada –dije mientras me separaba del escritorio-
-Claro, como tú quieras –sonrió- ¿Tienes hambre?
-Un poco –contesté mientras me acariciaba el estómago-
-Vale – cogió su teléfono y comenzó a teclear-
Varios segundos después, Justin soltó su teléfono en el escritorio, y me sugirió que nos sentáramos en la cama. Me levanté de la silla y me senté a su lado.
-Tu madre es muy guapa – comenté-
-Sí, y ya sabes lo que dicen, de tal palo tal astilla – sonrió-
- Creído –le di un pequeño guantazo en el hombro-
-¡Oye! No toques a Justin Bieber, chica –dijo mientras se tocaba el hombro-
-Para mí no eres el famosísimo Justin Bieber, para mí eres simplemente Justin.
-Ah, ¿sí? ¿Simplemente Justin? –preguntó-
-Sí, ¿por qué? ¿No te gusta? –me preocupé-
-Creí que era tu… tu novio –se sonrojó-
-Hombre, que yo sepa, no me lo has pedido –me hice la difícil-
-En ese caso…
En ese momento, pegaron a la puerta. Justin, con una gran sonrisa, se acercó a abrirla. Fuera estaba Pattie, sujetando algo con las manos. 

5 comentarios:

  1. Siguientee, Dios me encanta, me lo imagino y pff... Increíble.
    @LaauMR

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  2. Holaaaa, he visto que hace un tiempo que no publicas y es que no te tengo en el tuenti
    Me preguntaba si por favor podrías darme tu tuenti para saber cuando publicas o que paso con la novela
    Muchas gracias:D
    Por cierto, amo tu novela y tu forma de escribir*---* Eres buuenaaa;)

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  3. Hoolaap :) Soy nueva lectora!! Me empecé a leer tu novela ayer y chica,me encanta!!Además,yo me llamo Estefanía y tengo una amiga igualita a Inma jajaja ademas se llama igual!Espero que no hayas dejado de escribir:) UN BESOO (L)

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  4. noo vas a seguir con la novelaaa? porfavor sigue esq mencanta! (:

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  5. Jejeje,bueno,es cierto que hace tiempo que no subo capítulo,pero es que hace bastante tiempo que no escribo... No digo que vaya a dejar de escribir,pero quería terminarla entera e intentar que se publique en papel. Sé que va a ser difícil conseguirlo pero por intentarlo no pasa nada. En el caso de que no se pudiera publicar subiría todos los capítulos al blog... Intentaré terminar el 45 para subirlo pronto,muchísimas gracias por leer y seguir visitando el blog a pesar de que he dejado de subir:)

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